El Modelo Integrativista vs Medicina Alternativa

Mucha gente me pregunta que especialidad tengo luego de saber que soy Médico: mi respuesta es que no tengo una especialidad convencional pero me he dedicado a la Medicina Integrativa… – “¡ahhhhh eres medico alternativo!” – es lo que escucho con más frecuencia.

Hay una gran diferencia de conceptos entre lo “alternativo” y lo “integrativo”

La Medicina Alternativa se define como la práctica de terapias y métodos de curación que no se consideran parte de la medicina convencional.

La Medicina Integrativa utiliza tanto métodos “convencionales” como “alternativos” buscando una respuesta y solución a los problemas que presentan las personas.

Hay una gran diferencia de conceptos entre lo “alternativo” y lo “integrativo”

Dr. Rafael Vicuña

Pero el Modelo Médico Integrativista va más allá que su definición. Es una manera de VER, PENSAR y SENTIR diferente, independiente de las herramientas que utilice. 

Como su palabra lo indica INTEGRA a la persona en su totalidad, y la relaciona con el medio que la rodea, se involucra en los procesos vitales y no solamente en los estados. Es consiente con el SER y su ENTORNO, como también en su intervención y repercusiones en TODO EL ORGANISMO.

Utilizar medicamentos “naturales” para cambiar el comportamiento del organismo y así lograr un resultado previamente esperado lo llamo una “MEDICINA ALTERNATIVA MAL HECHA”, y por lo tanto NO ES Medicina Integrativa, ya que en esos casos el modelo terapéutico es el mismo de la medicina convencional: Una terapia Impositiva que no respeta los procesos y la singularidad de cada una de las personas… lo único que cambia es el fármaco, que es reemplazado por uno natural.

La Medicina Integrativa es un modelo terapéutico RESPETUOSO, CONCIENTE y ECO-LOGICO, que buscar por medio de la historia de cada persona y de un examen físico exhaustivo  llegar a la verdadera causa del problema sin la necesidad de ocultar el síntoma, sino de reparar el o los factores que lo originaron, logrando así la resolución del problema.

La jubilación mata

Puede parecer una sentencia injusta, agresiva de una gran frialdad.

Sabemos que en el transcurso de los años, el envejecimiento nos expone a innumerables enfermedades y condiciones que nos debilita día a día. Nuestros músculos pierden fuerza, nuestros huesos están más débiles, las funciones de algunos órganos comienzan a fallar… las visitas al médico se hacen cada vez más frecuentes, nuestros veladores tienen cada vez más medicamentos y las reuniones con nuestros amigos son cada vez más reducidas… es más, a muchos de ellos ya solo los vemos en la despedida de algún otro que ya partió…

Sabemos que la vida tiene su ciclo…. No sabemos cuándo, ni tampoco podemos evitarlo… pero sabemos que algún día partiremos de esta vida…

Sin embargo, mientras estamos en este mundo, muchos de nosotros perdemos la conciencia de lo que significa ESTAR VIVOS, de lo que somos capaces de hacer, sentir y disfrutar…. Solo dejamos pasar al tiempo, hasta que el tiempo nos alcanza en su final…

Sabemos que la vida tiene su ciclo…. No sabemos cuándo, ni tampoco podemos evitarlo… pero sabemos que algún día partiremos de esta vida…

Dr. Rafael Vicuña

Perdemos el interés en vivir, y me refiero a VIVIR profundamente, el disfrutar y compartir con nuestros seres queridos, el iniciar y completar proyectos pendientes, el SENTIRNOS UTILES para los demás, el TRABAJAR por y para nosotros… de todo esto, nunca debemos jubilarnos.

Perder el interés en la vida, sentirnos inútiles e incapaces de lograr algo y no hacer el intento de revertir ese sentimiento, nos conduce a una serie de deteriores físicos, mentales y emocionales, que nos hacen presa fácil de enfermedades y dolores…. Que poco a poco van acabando con nuestras vidas…

Por eso creo que la jubilación mata, y no me refiero a la jubilación laboral, sino a la JUBILACIÓN DE LA VIDA…

Esta es la carrera donde nunca debemos jubilar, debemos seguir trabajando por nosotros hasta el último segundo… siempre con el objetivo muy bien puesto en sentirnos UTILES, UNICOS e IMPORTANTES…  

No importa en qué etapa de la vida te encuentras en estos momentos… ¡VIVELA con ganas! Aprovéchala, cuídate, pero no dejes de disfrutar.

Cumple tus objetivos, plantéate metas, reúnete con los que quieres… a los adultos mayores de nuestros hogares no los dejemos de lado, integrémoslos en nuestras familias, que sigan cumpliendo un rol importante, asignándole tareas que sean capaces de realizar…. Si les hacemos todo, aunque sea con todo el cariño, sentirán que ya no son un aporte…. ¡NO LOS JUBILEMOS DE LA VIDA!….

¡Vive Feliz!

Los dientes también son parte de nuestro organismo

Afirmar que los dientes forman también parte de nuestro organismo puede parecer obvio, pero a la hora de vernos enfrentados a un problema de salud acudimos a un médico, atribuyendo como causa de dicho problema cualquier circunstancia que parezca directamente vinculada con el área afectada. Rara vez se mencionan los dientes dentro de la consulta, ¿no es cierto?.

Como médico recuerdo que, durante mis estudios, los dientes fueron un capitulo acotado y superficial, abordado básicamente en los primeros años de la carrera. A medida que avanzábamos y adquiríamos más conocimientos clínicos, los dientes fueron quedando cada vez más en el olvido, dejándoselos a los especialistas en la materia: Los odontólogos.

Es más, ¿Alguna vez un médico con la visión convencional ha relacionado un cuadro de tendinitis del codo (epicondilitis) con el antecedente de una endodoncia previa al inicio del cuadro?, o ¿un cuadro de dolor de rodillas (gonalgia) con la fractura o extracción de algún incisivo?, o más aún, ¿una enfermedad autoinmune con unas muelas del juicio impactadas? Más bien parece raro relacionar este tipo de problemas con antecedentes odontológicos.

Lo anterior ocurre a causa de la arbitraria separación de la medicina y la odontología. Ambas especialidades siguieron caminos paralelos sin siquiera interactuar entre sí: Los dientes al odontólogo y el resto del cuerpo a los médicos (y cada una de sus partes a los distintos especialistas)

Con todo, desde la visión de la Terapia Neural, la salud dental puede estar íntimamente relacionada con la génesis de algún problema de nuestro organismo, y ello ocurre porque nuestros dientes están interrelacionados gracias a la gran red interconectada que forma el Sistema Nervioso Neurovegetativo, encargado de comunicar todas las partes de nuestro organismo para que pueda funcionar armónicamente.

A todos mis pacientes, ya sea en la primera consulta o en los controles posteriores, les pregunto sobre sus antecedentes dentales, y en muchas ocasiones me veo sorprendido de la relación cronológica y/o contextual que se observa entre un evento odontológico y la aparición de un cuadro físico en alguna parte de su cuerpo, ya sea que se manifieste sólo como un síntoma o una enfermedad propiamente tal..

La sola aplicación de Procaína sobre el tejido circundante de los dientes afectados puede provocar la disminución o desaparición de los síntomas en algunos casos. En otros se debe insistir en más de una ocasión o combinar con otros campos de irritación presentes en el organismo, o quizás, con el saneamiento de la pieza dental involucrada (esto último es efectuado por odontólogos que practican la Terapia Neural desde la Odontología Neurofocal (ONF))

Siguiendo esta técnica, alteraciones funcionales en el sistema digestivo, tales como colon Irritable, estreñimiento, gastritis, problemas respiratorios como obstrucciones bronquiales, enfermedades crónicas respiratorias, problemas del aparato urogenital (cistitis a repetición), dolores articulares a nivel cervical, lumbar, hombros, codos, muñeca, manos, cadera, rodilla tobillos, pies, y un largo etcétera, pueden verse beneficiados si consideramos a los dientes como un antecedentes importante en la génesis del problema..

Considerando este aspecto a la hora de evaluar a una persona con un determinado problema de salud, su oportuna y adecuada intervención -según corresponda- a veces combinada con otras medidas terapéuticas que complementen el tratamiento si así se requiere, podríamos llegar a encontrar una solución a un problema que la medicina convencional ha catalogado como crónico o muchas veces como irreparable.